martes, 15 de diciembre de 2009

Pasa la vida

Tus ilusiones y tus bellos sueños
todo se olvida




Se me han caído las tetas,
los párpados,
el labio superior.
Miro mi cara, siento mi cuerpo y,
efectivamente
ya no soy la que era,
(ni daré las gracias ni pediré perdón).
En tres meses cumpliré los cuarenta
y no entraré en esa vorágine de aparentar
como poco, diez años menos.
Me harta hasta la saciedad tanto anuncio antiarrugas, antiestrés
antiestrías, anticaída, anticelulitis, antienvejecimiento.
Esto es lo que hay, señoras y señores:
dejen de insistir en esa idea tan poco inteligente
de que los días restan
y que es necesario disimular su rastro.
No lo soporto más.
Es urgente un cambio de enfoque:
Piénsenlo un rato, joder
no todo debería limitarse a vender potingues.
Y si no tienen capacidad
para motivarme en un futuro
al menos, no me insulten por seguir viva.


Imagen: Yo misma este verano, sin pintar, sin crema hidratante, sin adelgazantes, sin las últimas tendencias en moda, tirada en la hierba, sin otra expectativa que reir. Y de qué manera. Hay que tener años para poderse reir así. Si pinchan en el link de arriba, le pondrán la banda sonora a esta entrada.