viernes, 22 de mayo de 2009

Lejos

Si te separas de mí
que sea para traicionarme




Nos escondemos tras lo que mostramos
y tanta punta de iceberg
acaba por joder al cielo.

No nos debería extrañar que cualquier día de estos
llueva sangre.

¿Nos manifestaremos entonces?


Imagen: A. GONZÁLEZ. Ondas de una muerte lenta. 2007.

6 comentarios:

Le Mosquito dijo...

¿...por nuestras propias acciones?

Sí: no estaría mal. Pediré hora para hacerme una revisión.

Un beso romo.

D. Herque dijo...

Supongo que “los de arriba” hace tiempo que pusieron un falso techo de escayola y pasan de “los de abajo” que casi siempre somos los que tenemos la paellera mas sucia o los que terminamos los primeros en un carrera de últimos.

De ahí tanto tiempo de sequía y más de una lluvia de potasios de color marrón por eso las fábricas de paraguas hacen “ídem” y los sombreros son de polietileno con canalón.

Besos desde el portal.

luis dijo...

Creo que la gente se manifiesta más de lo que se cree,no se dice que la cara es el espejo del alma? un saludo.

Lamia dijo...

Y a veces nos manifestamos demasiado para no mostrar lo que de verdad importa.

celebrador dijo...

Pase lo que pase con as puntas de los icebergs, nunca fue sensato pedir peras a los olmos, y menos aun confiar en que nos las dieran

Sara Fedrika dijo...

Me gusta tu poema. Veo el cielo rasgado por la punta del iceberg. Sabes trasmitir la imagen a la perfección. Y a mí me encanta ver las "imágenes" de los poemas.

Genial.